Métete por ese Camino Desconocido
A través de la creatividad y el trabajo duro, esta organización solidaria proporciona gratuitamente itinerarios descargables en GPS, además de muchos recursos prácticos para recorrer 10 espectaculares rutas off-road por los Estados Unidos, y están preparando la undécima.
“En 2019, pisé por primera vez el Lippincott Pass, una trialera todoterreno rocosa, empinada y escarpada en la BDR del Sur de California. Bajamos el paso y la verdad es que puso mi capacidad al límite. En 2020, hicimos la ruta al revés, es decir, remontamos el Lippincott”.
“Aunque el BDR californiano fue algo absolutamente inspirador, y las secciones más técnicas las pasé sin problemas, por dentro estaba dándole vueltas constantemente a este desafío del Lippincott. Un año antes habíamos tenido un descenso duro, pero el hecho de subir montañas, en general, suponía un reto mucho mayor para mí. ¿Cómo reaccionarían mis compañeros de expedición si no lo conseguía? Con un nudo en el estómago, intenté apartar los malos pensamientos de mi cabeza; que la moto se estropeara, o peor, que yo me hiciera daño. La base del Lippincott no está marcada, pero todas las células de mi cuerpo lo supieron cuando llegamos. El comienzo es agradable y modesto, pero mi instinto sabía que el gran desafío estaba esperándome”.
A por los pedruscos
“Salí bien parada de las piedras iniciales, concentrada y creciendo mi confianza. Pero la cosa se puso más complicada, porque las piedras eran mayores, aunque seguía diciéndome que “¡voy a conseguirlo!”. Pensando en mí, mi confianza iba en aumento, porque la cosa parecía que progresaba adecuadamente. Hasta que golpeé una gran roca, perdí la concentración y me caí. En seguida me echaron una mano. Volví a subir a la moto y me siguieron de cerca, ayudándome a intentar de nuevo la sección más dura del paso. Con lágrimas en los ojos, me uní a ellos en una demostración de victoria colectiva en la cima del paso de montaña Lippincott”.
“No son los movimientos fáciles de las BDR los que se te fijan en la memoria, sino aquellos momentos en los que hay que profundizar en una misma para superar las dificultades. Es igualmente importante ser consciente de que si te das de bruces con un obstáculo difícil de superar, tus compañeros/as van a estar ahí para ayudarte”.
“A veces encuentras un hogar, y a veces es el hogar el que te encuentra a ti. Hace dos años dejamos Iowa con mi pareja, con la esperanza de encontrar un nuevo hogar en algún otro lugar. Una excursión de aventura con un amigo me llevó a una BDR por el estado de Washington. Durante unos días condujimos por un desierto inacabable, por picos pintados de nieve y cruzamos pueblos aislados en los que solo había una señal de tráfico de stop”.
“Estaba enamorado del hecho de no tener más preocupaciones que llenar mis maletas y mi depósito de gasolina. Mi alma se paseó durante largos días en los que mi única decisión fue tomar una dirección determinada y escoger el lugar en el que plantar la tienda de campaña por la noche. Un sentimiento que se acrecentó por la inmersión en esa vasta belleza natural, compartida con amigos”.
“Aquel BDR por Washington me enseñó algo que no esperaba. Washington me sacudió el corazón y me silbó al oído que ‘esta es tu casa’. Dos días después de completar la aventura, me llegó una oferta para trabajar en Backcountry Discovery Routes, la organización que había creado esa auténtica ruta en la que había encontrado un nuevo hogar. O tal vez, mejor decir un hogar que me había encontrado a mí”.
“Me desperté la mañana de mi 65 aniversario, en un frondoso bosque californiano, y en seguida me asaltaron algunas preguntas que rebotaron en el interior de la tienda de campaña e incidieron directamente en mis ojos: ‘¿Cómo he llegado hasta aquí?’. Conmigo estaban tres dedicados embajadores de BDR, con los que el día anterior habíamos estado estudiando esta ruta BDR del Norte de California (cuando la ruta de Oregón se completa, esta permite que los motoristas de aventura puedan realizar un desplazamiento continuo entre Canadá y México, por algunas de las pistas de tierra más espectaculares del mundo). Sí, vale, pero, ¿cómo he llegado hasta aquí?”.
“Crecí en California y mi interés por las motos era más bien poco. Siempre me he considerado un conductor mediocre. ¿Cómo he llegado hasta aquí, contribuyendo al diseño de otra Backcountry Discovery Route, un recorrido que disfrutarían algunos de los mejores pilotos de aventura del estado? Todo empezó cuando mi colega de aventuras se lesionó en una pierna y yo me presenté voluntario en su lugar a un programa nacional de vehículos para bosques (National Forest OHV Program). Antes de saber eso, estuve en mitad de un acto de recogida de fondos del BDR, para hablar en una habitación llena de ávidos motoristas de temporada sobre una nueva ruta en California. Sigo preguntándome cómo he llegado hasta aquí”.
“Supongo que cuando se te presenta la oportunidad de compartir tu pasión, hay que darlo todo. Y eso es precisamente lo que le ocurre a cualquier apasionado voluntario de la BDR. Como organización sin ánimo de lucro, se apoya en personas que van a responder siempre con sonoros síes. La recompensa es dormir en una tienda de campaña a tus 65 años, y despertarte con una gran sonrisa en tu cara. Porque sabes positivamente que has contribuido a las mismas sonrisas de incontables motoristas comprometidos, que han descargado sus rutas GPS gratuitamente en www.ridebdr.com, y que también gritan esos mismos síes”.
“Cuando inicias la preparación una nueva ruta BDR, la magia te impregna los huesos. Siento un hormigueo que me recorre el cuerpo de arriba abajo cuando encuentro el sendero perfecto. Esta vista tan despampanante, o esa remota y desconocida pista que parece el Cielo en la Tierra, la tienes que incorporar al nuevo itinerario para que otros muchos puedan sentir la misma inspiración que yo siento al encontrarla por primera vez. Explora con pasión. Encuentra un sentido a la vida en este presente. En el que a cada recuerdo intenso le sigue otro de la misma naturaleza, que se convierte en la más penetrante experiencia que has sentido nunca”.
“Cuando los primeros vientos frescos otoñales nos golpean la cara y una pequeña gota fría me toca la barbilla, dejo ir un par de lágrimas de gratitud por estar vivo y compartirlo con otros colegas exploradores, con los que me muevo por lo más remoto e inhóspito del estado de Oregón. Me rodea una vasta extensión de belleza natural, que se muere porque la valoren todos esos que compartimos la misma pasión. La que fluye con la conexión con ese tipo especial de paisaje campestre, que solo puede encontrarse en parajes perdidos de los Estados Unidos”.
“Ser una parte del equipo BDR es una extensión de esta misión que tengo de disfrutar cada día de mi trabajo. No hay mejor oficina que la visión por detrás del manillar de mi motocicleta, explorando y disfrutando del momento”.
Un sentido agradecimiento al equipo BDR por compartir con nosotros sus experiencias y vivencias en REV’IT!
Para descubrir tu propia aventura en el interior de los Estados Unidos, incluyendo la próxima y nueva ruta por Oregón, visita ridebdr.com y sigue @ridebdr en Instagram.